Mura Masa tiene El himno para tu glow up y el de nadie más llamado “I’m Really Hot (For Myself)”

Mura Masa estrenó el soundtrack ideal para ese mood mañanero en donde te ves al espejo y piensas: "¡Wow, qué joya soy!". Esto viene en su nuevo sencillo, "I'm Really Hot (For Myself)", es una bomba de energía que te golpea macizo y te jala a la pista de baile, pero no para que otros te vean, sino para que te sientas el más cool del mundo. Ya que, desde el primer segundo te advierte: "esto no es para los que tienen pena". Te juramos que te quedas pensando cómo un beat tan fuerte puede sentirse tan liberador, ¿verdad?

En un mundo donde a veces solo buscamos que los demás nos digan que somos suficientes, esta rola es todo lo contrario: es pura autoaceptación. La canción es un grito de confianza para que te conviertas en tu fan número uno, porque el amor propio es lo más importante. La música es una locura, un ritmo industrial que parece que nunca va a parar. La batería te retumba en el pecho y los sintetizadores te dan una emoción... ¡uff! Y es que suena como si la mismísima Missy Elliott hubiera llegado a colaborar con Mura Masa. El sample de su rola del 2003 le da un toque de nostalgia, como de peli de los 2000, pero con un rollo súper moderno. 

El video es la cereza del pastel. Ves a dos gemelos bailar en un lugar sin adornos, como si nadie los estuviera viendo. Es la forma más clara de entender el mensaje de la canción: el baile es para ti, para que te sientas libre por dentro. Es perfecta para esos momentos en que te estás arreglando para salir y te pones a bailar frente al espejo. "I'm Really Hot (For Myself)" te recuerda que no necesitas que nadie más te diga lo increíble que eres, ¡tú ya lo sabes!

Esta canción es puro empoderamiento con un buen beat. Te invita a dejar atrás las preocupaciones y a disfrutar el momento, a sentirte superpoderoso. Te llena de euforia, felicidad, de una adrenalina que solo sientes cuando estás bailando con todo. Al final del día, Mura Masa nos recuerda que la música es un refugio, un lugar para ser tú mismo, sin miedo a nada. Es un buen recordatorio de que a veces, tu mejor compañero de baile eres tú.